Al Amparo del Altísimo

Ministerio de formación en la fe y de evangelización. Nos regimos por lo que manda la Santa Madre Iglesia y lo damos a conocer por medio de charlas, conferencias, talleres, prédicas, retiros y acompañamiento de comunidades. Buscamos que las personas descubran el sentido católico real de su fe, enseñanza de la Madre Iglesia durante dos mil años.

Misión

Formar a través de catequesis y evangelización, dentro y fuera de la Iglesia, de manera especial a un público de jóvenes y jóvenes adultos. Queremos que, todos los que reciban el mensaje de Dios por medio de nosotros, se identifiquen y amen la Santa Madre Iglesia Católica.

Visión

Ser un ministerio de reencuentro de las personas con Dios vivo y con la Iglesia, y llegar cada vez a más personas utilizando efectivamente los valores humanos a través de los medios de comunicación y las redes sociales.

Cristo nos ha sido dado por el Padre para que, al vivir por Él, lo amáramos; sin Él, vivir es morir.

San Antonio de Padua

Qué creemos

Creemos en un solo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.
Creemos en un solo Señor, Jesucristo, Hijo Único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.

Creemos en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas.

Creemos en la Iglesia, que es Una, Santa, Católica y Apostólica. Confesamos que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados. Esperamos la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.

Amén.